Gobernanza, innovación y nuevas formas asociativas para el bien común en América Latina y el Caribe.

La XIV Conferencia para América Latina y El Caribe de la International Society for Third Sector Research y el XXII Congreso de Investigación sobre el Tercer Sector

Humberto Muñoz Grandé[i]

Romina Farías Pelayo[ii]

Carlos Chávez Becker[iii]

Del 1 al 4 de julio de 2025 se realizaron en la Universidad Anáhuac México la XIV Conferencia para América Latina y El Caribe de la International Society for Third Sector Research (ISTR) y el XXII Congreso de Investigación sobre el Tercer Sector. Ambos eventos se llevan a cabo cada dos años y constituyen referentes científicos internacional y nacional importantes en temas de sociedad civil y el tercer sector.

La unión de ISTR, la Universidad Anáhuac y el Centro Mexicano para la Filantropía permitieron la celebración de estos magnos eventos que contaron con la participación de 176 investigadores y doctorandos de América Latina y El Caribe, una cifra récord de participantes en la historia de estas conferencias en la que se contó con el apoyo de 16 universidades de la región integrantes del Comité Académico.

Se definieron 10 ejes temáticos en función de su relevancia académica y de la coyuntura política del subcontinente, dando como resultado tres conversatorios plenarios, una conferencia magistral, 97 ponencias aprobadas y siete mesas redondas. Los ejes temáticos fueron los siguientes:

  1. Se analizaron los movimientos sociales, cultura de paz y Estado de derecho en el contexto del funcionamiento y las contradicciones que se presentan en los sistemas políticos democráticos, el papel de las organizaciones de la sociedad civil (OSCs) para contribuir a los procesos de fortalecimiento del tejido y la cohesión social con base en procesos de colaboración y nuevos vínculos con el Estado.
  2. Un eje temático que siempre está presente en estos eventos es el de las relaciones entre gobierno y sociedad civil. Las olas democráticas, antidemocráticas, cosmopolitas y etnonacionalistas en América Latina y El Caribe se han acentuado en las últimas décadas, modelando la relación entre los gobiernos nacionales, provinciales y locales con la sociedad civil y sus organizaciones. Para entender estas relaciones, se presentaron ponencias desde múltiples enfoques teóricos y disciplinares, como el análisis de los marcos legales e institucionales, las relaciones gobierno-mercado-sociedad civil, y la evolución de la respuesta de la sociedad civil en regímenes autoritarios y populistas.
  3. Las investigaciones sobre acciones voluntarias, colectivas y ciudadanía activa; analizaron la participación del voluntariado en la asistencia social, en las organizaciones, en el apoyo a causas emergentes, en la medición de su contribución económica, su aporte al desarrollo sostenible o su contribución al desarrollo humano, regional, nacional y global. También se discutieron las acciones colectivas, procesos de organización y participación ciudadana en diferentes espacios y ámbitos de la vida pública local y global; así como las acciones colectivas emergentes e iniciativas ciudadanas que buscan generar no sólo nuevas formas de interacción con el Estado, sino incidir en procesos de agenda política y programas de gobierno con el propósito de fomentar una nueva ciudadanía para hacer posible la gobernanza democrática.
  4. La gobernanza y gestión social de las OSC fue un eje paraguas que incluyó diferentes aproximaciones al análisis del sector. El impacto que tienen los modelos de liderazgo y de comunicación en la gestión de las OSC es tan relevante que las y los investigadores de la región coincidieron en que son los elementos fundamentales que posibilitan la subsistencia de las organizaciones en caso de enfrentar una crisis, la adaptación a entornos cambiantes y el desarrollo de procesos de innovación y atracción de recursos.
  5. La filantropía crítica y nuevas expresiones, ha sido criticada desde hace algunos años desde perspectivas decoloniales y antirracistas que han tomado fuerza al evidenciar el rol que puede desempeñar la filantropía en la perpetuación de sistemas de opresión y relaciones desiguales de poder; pero al mismo tiempo como catalizador y generador de soluciones ante las desigualdades. Para responder a estas preocupaciones, se debatieron soluciones desde enfoques sistémicos, de localización en la recomposición de las estructuras de poder, la incorporación de perspectivas de territorio y comunitarias, así como esquemas flexibles de donación. Estos enfoques permitieron abrir camino a nuevas formas de hacer filantropía, como la filantropía comunitaria, estratégica y sistémica, entre otras; que buscan transformar las prácticas e incluir mecanismos alternativos y objetivos más transformadores.
  6. El emprendimiento social para el desarrollo sostenible fue uno de los ejes dinámicos en el evento, sobre todo a partir del papel que juegan las Instituciones de Educación Superior en el compromiso y formación de emprendedores que apliquen las competencias necesarias para generar proyectos que mejoren la calidad de vida de las comunidades, identificando el interés general para un cambio social.
  7. La investigación y enseñanza de la sociedad civil en universidades fue un eje relevante al revelar estudios y acciones para leer a nuestra sociedad, cuestionarla y redefinir el rol del Tercer Sector, comprender la relación entre Estado, sector empresarial y sociedad civil; y detectar nuevas formas de conexión y modelos de interacción. El papel de las nuevas generaciones en el diseño de métodos de participación e investigación diferenciados de los tradicionales fue una constante en las ponencias; al igual que el debate respecto de las nuevas formas colectivas, las dinámicas de co-creación y colaboración en América Latina y el Caribe como enfoques innovadores que promueven el bien común y fortalecen la cohesión social.
  8. La innovación, datos e inteligencia artificial (IA) en la sociedad civil permitió reflexionar sobre cómo estas tecnologías favorecen una gestión más eficiente y una toma de decisiones basada en evidencia, aumentando el impacto y la efectividad de las iniciativas de las OSC. Desde luego, se analizó también cómo la adopción de la IA presenta desafíos significativos, como la privacidad y seguridad de los datos, las desigualdades en el acceso a la tecnología y la necesidad de transparencia y rendición de cuentas en los sistemas automatizados.
  9. Las OSC enfrentan el reto de integrar la sostenibilidad como eje central de sus acciones. Su papel como agente de cambio y promotor del bienestar comunitario demanda una visión a largo plazo, donde la gestión responsable de recursos y la promoción del desarrollo social sean prioridad. Una mirada multidisciplinaria del desarrollo en donde las perspectivas económica, sociológica y ecológica se unan para observar los fenómenos fue parte de las reflexiones de este eje sostenibilidad ambiental, responsabilidad social y alianzas.
  10. Finalmente, el eje de acción social ante los cambios demográficos y el envejecimiento desveló debates respecto del rol de la sociedad civil ante los problemas sociales, ante los cambios demográficos, y las necesidades de la población envejeciente; así como sobre la urgencia de nuevas formas asociativas y experiencias en América Latina y el Caribe de cara a la Década del Envejecimiento Saludable.

En estos 10 ejes temáticos se presentaron 97 ponencias de investigación organizadas en 31 sesiones simultáneas y siete mesas redondas; además de la organización de la Feria del Libro con la participación de 13 editoriales, una presentación de libro y una exposición de datos (Data Walk).

 

 

La Conferencia Magistral corrió a cargo del investigador Jesús Silva Herzog-Márquez sobre Democracia y Sociedad Civil en América Latina en la que subrayó la urgencia de reivindicar la moderación en la política contemporánea, especialmente en un contexto dominado por la polarización y la retórica incendiaria. En su alocución señaló que la figura del moderado ha sido injustamente relegada al papel del cobarde o de tibio, cuando en realidad representa un compromiso con la razón, la duda y la deliberación democrática. En contraste con la visceralidad que caracteriza a los líderes dicotómicos —quienes reducen la política a una batalla entre amigos y enemigos—, el moderado es quien, apuesta por el diálogo, el pluralismo y la construcción de consensos, elementos esenciales para una democracia saludable, pero cada vez más despreciados en el debate público.

Silva-Herzog Márquez advirtió que esta agresividad discursiva no solo emana del poder, sino que se ha filtrado en la sociedad, donde también se estigmatiza al ciudadano reflexivo, al académico crítico y al investigador imparcial. La figura del intelectual es vista con sospecha, como si su búsqueda de matices y complejidad fuera una traición a las emociones colectivas. En este clima de encono, la política se transforma en un espectáculo de afirmaciones absolutas y fidelidades ciegas, donde no hay espacio para la ambivalencia ni para el pensamiento crítico. Recuperar la moderación, entonces, no es un simple gesto de estilo, sino una tarea ética y política urgente para resistir la simplificación autoritaria y reconstruir un espacio público donde la diferencia no sea motivo de odio, sino de diálogo.

Se realizó también un Conversatorio sobre Espacio Cívico en América Latina y El Caribe con la participación de la Universidad Anáhuac México, la Universidad Centroamericana de El Salvador, la Universidad de Puerto Rico y el Colectivo Nicaragua Nunca Más. En Nicaragua—señaló un panelista quien ha sido exiliado de su país por ejercer el periodismo—el espacio cívico ha sido severamente restringido en los últimos años, con un gobierno que ha intensificado la represión contra la libertad de expresión, de asociación y de reunión pacífica. Periodistas, activistas y defensores de derechos humanos enfrentan acoso, criminalización y exilio forzado. Las manifestaciones públicas han sido prohibidas de facto, las peregrinaciones religiosas están prohibidas fuera de los templos, y numerosas OSCs han sido clausuradas con pretextos legales. Las universidades, tradicionalmente espacios de pensamiento crítico, han sido intervenidas, muchas han perdido su personería jurídica, sus instalaciones han sido confiscadas y sus docentes y estudiantes perseguidos por expresar posturas contrarias al gobierno.

En El Salvador, se reflexionó, se ha promovido un discurso de confrontación con la prensa independiente y se han impulsado reformas legales que limitan el trabajo de organizaciones sociales. Aunque existe una mayor permisividad para algunas formas de reunión pública, éstas suelen estar controladas y las universidades, especialmente las públicas han sido objeto de presiones políticas y recortes presupuestarios. En Puerto Rico, aunque rige un marco democrático, se concluyó que la crisis económica y la dependencia política al gobierno de Estados Unidos han generado tensión en el espacio cívico.

Se presentó también el estudio de caso “Una propuesta de valor para la docencia, la investigación y la práctica,” en la que se examinó cómo los estudios de caso resultan ser una herramienta eficaz para preparar a los estudiantes para su incorporación al sector y describió cómo los educadores los han utilizado con éxito tanto en el aula como en espacios de desarrollo de capacidades de la sociedad civil. Este espacio contó con la participación de académicos de la Universidad de Albany, SUNY; la Universidad San Andrés, Argentina; y la Universidad Adolfo Ibáñez—Centro de Filantropía e Inversión Social, Chile; quienes analizaron la eficacia de los casos didácticos como método de aprendizaje, compartieron consejos para su desarrollo e identificaron maneras de encontrar casos sólidos con fines educativos. La sesión también destacó cómo el proceso de desarrollo de casos didácticos había contribuido a proyectos de investigación de gran impacto, lo que ilustra la sinergia entre la docencia y el trabajo académico.

“El futuro de la sociedad civil y el papel de la investigación: investigación para la práctica” fue otro de los eventos plenarios en los que se exploró cómo la investigación podría satisfacer las necesidades cambiantes de la sociedad civil y apoyar su respuesta a los desafíos globales. En este evento, Cemefi, RACI Argentina y CIVICUS; advirtieron la urgente necesidad de que la sociedad civil reconsidere sus prácticas ante las crecientes presiones globales, destacaron la desconexión entre la investigación académica y las necesidades prácticas de las OSC y exigieron perspectivas más prácticas y relevantes. El debate se centró en cerrar esta brecha, mostrando cómo la investigación puede convertirse en una herramienta para fortalecer la eficacia, la resiliencia y el impacto de la sociedad civil.

Cada dos años la ISTR organiza para América Latina y El Caribe, el PhD Seminar donde doctorandos de las distintas universidades de subcontinente participan después de un riguroso proceso de selección para recibir asesoría y presentar avances de tesis ante los más destacados investigadores de la región. En esta ocasión, se contó con la participación de 14 estudiantes de doctorado de siete países, cuya coordinación estuvo a cargo de la UNAM, con el apoyo de un profesor de alto nivel de Colombia, Estados Unidos, México y Honduras; quienes interactuaron con los estudiantes, ofreciéndoles valiosa retroalimentación sobre sus investigaciones y creando oportunidades significativas para el networking y el desarrollo profesional. El seminario comenzó con una sesión de desarrollo profesional a cargo de la Dra. Karla Valverde de la UNAM sobre cómo navegar el proceso doctoral, centrándose en la investigación significativa, las relaciones con los asesores y la conciliación de la vida laboral y personal. Posteriormente, los estudiantes participaron en debates en grupos pequeños para presentar y recibir retroalimentación sobre sus investigaciones. La ponencia «¿Cómo publicar?», dirigida por la Universidad de Albany, SUNY, orientó a los estudiantes sobre cómo navegar el proceso de publicación y evitar las revistas depredadoras.

En el marco de este evento se entregó también el XVIII Premio a la Investigación sobre Sociedad Civil, que en esta edición reconoció ocho tesis, distribuidas en las categorías de Maestría y Doctorado. Este premio busca trabajos que contribuyan al conocimiento y análisis de la sociedad civil en América Latina. Dichos trabajos contemplan temáticas como incidencia de las organizaciones de la sociedad civil, el análisis retrospectivo sobre la contribución al desarrollo social del Programa de Coinversión Social, el reconocimiento sobre los intérpretes de lenguas indígenas en el sistema de justicia, las OSCs como escenarios para el empoderamiento de mujeres cisgénero, entre otros temas. El incentivo, adicional a la entrega del Premio, contempla la edición de dos libros digitales, correspondientes al primer lugar en cada categoría, para divulgar la aplicabilidad y practicidad de las investigaciones para nuevas audiencias.

Finalmente, los estudiantes participaron en un Concurso de Tesis de 3 Minutos. Viridiana Ulloa Bobadilla de la Universidad Anáhuac México ganó por su investigación sobre la sociedad del cuidado y la equidad de género en América Latina; mientras que André Manoel de Brasil y Denisse Álvarez de Ecuador recibieron menciones honoríficas.

La ISTR realizará su siguiente conferencia mundial en julio de 2026 en Lisboa, Portugal en el Iscte – Instituto Universitário de Lisboa, bajo el título Imagining the Next Generation:  Strengthening the Foundations of the Third Sector. Invitamos a todos los investigadores mexicanos y de la región a que postulen sus temas en https://www.istr.org/page/ISTR2026

¡Nos vemos en Lisboa 2026!

[i] Investigador invitado en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM. Profesor Investigador de la Facultad de Responsabilidad Social. Universidad Anáhuac México

[ii] Directora de Investigación del Centro Mexicano para la Filantropía

[iii] Profesor investigador de la UAM-Lerma

Tendencias globales para las organizaciones de la sociedad civil en escenarios de gobernanza jerárquica

Carlos Zarco Mera

Humberto Muñoz Grandé

Según Kooiman (2003) existen diversos tipos de gobernanza: autogobernanza, cogobernanza y gobernanza jerárquica. Particularmente esta última ha llamado la atención. En Gobernanza jerárquica y espacio cívico en Nicaragua se analizó la relación entre este tipo de gobernanza y sus efectos en las libertades de asociación, reunión pacífica y libertad de expresión en ese país.

Desde conceptualizaciones como populismo, autocracias o autoritarismos; la preocupación es compartida a nivel mundial y especialmente en América Latina y El Caribe (LAC). Think tanks y organizaciones internacionales se han sumado a esta inquietud. El International Civil Society Centre (ICSC 2024), en coordinación con diversas organizaciones a nivel internacional, han desarrollado una metodología de análisis de escenarios para identificar tendencias y futuros posibles (anticipating futures) que facilitarían o afectarían el aporte de las organizaciones de la sociedad civil (OSC).[i] Entre las principales tendencias se constata el retroceso democrático en el mundo. Al respecto, se advierte:

El retroceso de la democracia liberal está extendiéndose por todos los continentes, manifestándose en diversas formas, como los cambios en la derecha política, la elección de partidos populistas y líderes con tendencias autoritarias. La erosión de las normas democráticas y el aumento del autoritarismo podría restringir aún más la libertad de expresión, asociación y reunión; lo que lleva a un aumento de las amenazas y los ataques a los activistas, y una disminución en la capacidad de las organizaciones de la sociedad para funcionar de manera efectiva. Las voces de las comunidades marginadas podrían ser cada vez más silenciadas, lo que plantea un grave desafío a la preservación de los espacios abiertos y sociedades inclusivas.

El correlato del incremento de los autoritarismos es la reducción y cierre del espacio cívico. Como parte de esa dinámica internacional de favorecer análisis que permitan proyectar futuros posibles y anticipar o prever acciones para aprovechar oportunidades, administrar mejor los riesgos o mitigar impactos negativos; se ha promovido la reflexión en diversos contextos nacionales y regionales. En ese sentido, a finales de 2024, un grupo de expertos de Argentina, Brasil, Chile, Cuba, Guatemala, México y El Salvador fueron invitados a la Ciudad de México por parte del Colectivo UnidOSC[ii] de México para analizar los desafíos y oportunidades del espacio cívico y de las OSC, usando la metodología mencionada.

A partir de evidencias compartidas entre estos expertos, se identificaron las principales tendencias en la región que influyen más directamente en el quehacer de las OSC, mismas que acontinuación enunciamos.

Además de los retrocesos democráticos, se constata en la región la reducción de la laicidad del Estado ante el auge de movimientos religiosos fundamentalistas en los procesos electorales en alianza con partidos políticos; las corrientes migratorias por razones económicas, políticas y climáticas en las condiciones adversas en que se están llevando a cabo lo que profundiza la condición de vulnerabilidad de millones de personas; la reconfiguración de referentes políticos y culturales ante la crisis del esquema izquierda—derecha; la creciente polarización y el debilitamiento de espacios de deliberación, situación que se expresa también en divisiones dentro de la sociedad civil; la crisis del multilateralismo (Guilbaud, 2023) con sus expresiones en el debilitamiento de los organismos regionales; la crisis financiera del Sistema Interamericano (Tokatlian, 2020), las tensiones en la OEA y la dinámica de la CELAC; y la presencia y acción del crimen organizado que controla territorios e infiltra estructuras del Estado (Velez et. al, 2021), dando origen a esquemas de macrocriminalidad donde confluyen corporaciones privadas y gobiernos. En ese clima de creciente inseguridad ciudadana se han activado en la región las simpatías con ofertas de mano dura y de militarización de la seguridad pública.

En el marco de esas tendencias se identificaron cuatro que desafían directamente el quehacer de la sociedad civil: el auge de las autocracias (Forti, 2024), el auge de corrientes y movimientos anti-derechos, los cambios dentro de la cooperación internacional y las configuraciones posibles dentro de la sociedad civil. Sobre cada una de estas tendencias se trabajaron los escenarios de futuro con base a una matriz[iii] en la que se definen tensiones e incertidumbres sobre la realidad analizada. Para facilitar la comprensión de cada escenario se buscó una metáfora.

En cuanto a la erosión de la democracia se constata el cierre gradual del espacio cívico, así como la estigmatización y crecientes restricciones legales contra las OSC (registro, control de financiamiento, límites a su acción, cierres obligados). En el marco de este fenómeno destaca el autoritarismo digital a través del cual los regímenes se valen de las tecnologías de la información para estigmatizar, reprimir y manipular a las audiencias. El ICSC señala al respecto que acciones como el bloqueo al acceso a internet, censura de contenidos, la difusión de desinformación y la cooptación de redes sociales y otras plataformas en línea serán estrategias en crecimiento. En consecuencia, se plantea una hipótesis sobre la erosión democrática que relaciona las variables de gradualidad de la gobernanza jerárquica y capacidad de respuesta de las OSC. La siguiente figura ilustra esto a partir de cuatro escenarios.

Fuente: Elaboración propia

En relación con la emergencia y consolidación de grupos / corrientes ideológicas anti-derechos en ambos polos, tanto de derecha como de izquierda, la consecuencia es naturalmente un limitadio avance del pluralismo. El auge de estas visiones de mundo ponen en riesgo derechos conquistados conduciendo naturalmente a la polarización y a la división dentro de la sociedad civil en un marco de reconfiguración de referentes políticos donde el esquema izquierda—derecha ya no es suficiente para entender el papel de los derechos humanos. En este caso la hipótesis plantea la relación entre el acceso a espacios de poder y la legitimidad de las organizaciones protagonistas de esta tendencia. La figura que aparece a continuación da una idea de los posibles escenarios que se dan de esta relación en la que a mayor o menor acceso a espacios de poder para tomar decisiones de parte de esos grupos anti-derechos, se da una mayor o menor aceptación y legitimidad social de los mismos.

Fuente: Elaboración propia

La tercera tendencia en la región va muy de la mano con lo que sucede en otros países occidentales, se trata de lo que ICSC define como la nueva generación de movimientos sociales dirigidos por jóvenes orientados a resolución de problemas y comprometidos políticamente con una movilización masiva en línea y fuera de línea; ejemplo de ello, son los movimientos Black Lives Matter o MeToo. Esta nueva ola desafía las fronteras de la propia configuración de la sociedad civil que se debate entre su capacidad de innovación y de aprovechamiento de capacidades organizacionales y la posibilidad de incentivar dinámicas más amplias dentro de la sociedad, en tensión con la posibilidad de mayores o menores recursos, tanto financieros como humanos. La figura que sigue ilustra esta idea.

Fuente: Elaboración propia

La cuarta tendencia se refiere a los cambios que se están experimentando en la cooperación internacional con dos realidades que confluyen. Por un lado, la reducción de fondos para la cooperación al desarrollo con las consiguientes restricciones al financiamiento a las OSC. Por otro lado, los debates sobre la cooperación norte—sur, los esfuerzos por superar las lógicas coloniales para favorecer la colaboración y equidad entre donantes-receptores de fondos tanto para la definición de agendas temáticas como de objetivos programáticos. En el cruce entre acceso a financiamiento y redistribución del poder de decisión dentro de la cooperación se vislumbran los siguientes escenarios.

Fuente: Elaboración propia

La conjunción de escenarios refleja realidades a las que hay que dar seguimiento. Tal como lo demuestra la experiencia de diversos países, aún en regímenes dictatoriales la sociedad civil sigue siendo un actor de los procesos de democratización a través del trabajo en el exilio, de la resistencia y no pocas veces, de la pérdida de vidas por la represión. En la región tenemos un tejido de realidades que crean entornos diversos para la sociedad civil, desde los países con dictaduras como Cuba, Nicaragua y Venezuela (los tres con ideologías autodefinidas como “de izquierda”) hasta Chile, Uruguay y Costa Rica, reconocidos como democracias sólidas. Entre ellas, está la mayoría de países que, conforme a la categorización de The Economist, se mueven entre la democracia defectuosa y los regímenes híbridos, unos con ideología de izquierda y otros de derecha. En esas aguas está navegando la sociedad civil en sus diversas expresiones, manteniendo vínculos regionales y tejiendo procesos de solidaridad e intercambio.

Estas tendencias se dan en un momento en el que las OSC enfrentan sus propios desafíos como la división temática entre generaciones integrantes de la sociedad civil, las limitadas capacidades para generar acuerdos y alianzas entre agendas diferentes (temáticas, identitarias, ideológicas), recursos escasos para la generación de pensamiento, y una nueva generación de activistas que enfrentan el desafío de organización a mediano y largo plazo e inserción en el sistema de partidos políticos.

 

Referencias

  • Forti, S. (2024). Democracias en extinción: El espectro de las autocracias electorales. Universitat Atonoma de Barcelona. Madrid
  • Guilbaud, A., Petiteville, F., & Ramel, F. (Eds.). (2023). Crisis of multilateralism? Challenges and resilience. Springer Nature.
  • International Civil Society Centre (2024). A history of civic space 2024-2034. Outcomes of a parevo scenario writing collaboration. Berlin, Germany. https://solidarityaction.network/wp-content/uploads/a-history-of-civic-space-2024-2034.pdf
  • Kooiman, J. (2003). Governing as Governance. Institut Internacional de Governabilitat de Catalunya. Barcelona.
  • International Civil Society Centre (2023). Solidarity Action Network. Toolkit for tomorrow: anticipating civil society futures. Berlin, Germany.  https://solidarityaction.network/toolkit-for-tomorrow-anticipating-civil-society-futures/
  • Tokatlian, J. G. (2020). El descalabro del sistema interamericano. Nueva Sociedad. Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Argentina
  • Vélez, F. R., & Pascual, D. S. R. (2021). Crimen organizado y seguridad multidimensional. Tirant lo Blanch. Valencia, España.

 

 

[i] Esta metodología pretende aumentar la conciencia y la preparación de las OSC para abordar los retos que surgen entre el espacio cívico y los diferentes tipos de crisis que se enfrentan en los países, para a partir de ello, desarrollar escenarios futuros que se traduzcan en estrategias para enfrentar el futuro. Más información en https://solidarityaction.network/key-activities/anticipating-futures/

[ii] Colectivo por los derechos de las organizaciones de la sociedad civil que integra a OSC, académicos y activistas de diferentes entidades federativas de la República Mexicana https://derechososc.org.mx/

[iii] Solidarity Action Network. toolkit for tomorrow: Anticipating civil society futures. https://solidarityaction.network/toolkit-for-tomorrow-anticipating-civil-society-futures/